por Kurt Nimmo
Infowars.com
En Grecia, la explotadora operación bancaria de préstamo conocida popularmente como el Fondo Monetario Internacional propuso crear cortes y tribunales especiales para procesar a quienes evadan impuestos. El ministro de finanzas de Grecia, George Papaconstantinou, un miembro socialista de y graduado del London School of Economics, ha “sugerido el manejo efectivo de los denunciantes” para proteger a las personas que delaten leyes poco serias sobre los impuestos.
“La idea de cortes tributarias se refiere ya sea al establecimiento de tribunales especiales que manejarían casos tributarios sin tener que pasar por cortes normales o el nombramiento de un número adecuado de jueces especializados para la estructura existente de las cortes administrativas, quienes manejarán exclusivamente los casos tributarios”, informa Kathimerini, un suplemento del International Herald Tribune en Grecia.
El FMI también pide “chequeos exhaustivos respecto del pago del impuesto de valor agregado”.
A los banqueros y sus compinches les encanta el IVA porque legaliza el robo en cada etapa de la fabricación y distribución de productos.
Eleva desproporcionadamente los impuestos en las personas de medios y bajos ingresos. Es un mazo usado para destrozar sociedades. Se pondrá feo en Grecia porque los banqueros no sacarán la sangre de una piedra. La austeridad del tipo impuesto ahora en Grecia erosiona los ingresos por impuestos. Pero el plan no es elevar el ingreso por impuesto. Es destruir las naciones y dar paso al gobierno mundial.
Grecia fue gateando a la explotadora operación de préstamo globalista después de que su economía implosionó a través de una política “monetarista” de deuda. En otras palabras, después de que Grecia se unió a la zona euro, los banqueros manipularon el abastecimiento de dinero del país y luego destruyeron los apoyos con hedge funds y otros esquemas de especulación bancaria diseñados para nivelar las economías nacionales.
En abril, el gobierno socialista de Grecia le rogó a la UE y el FMI por préstamos de interés. El mes siguiente, el FMI hizo exigencias por “medidas de austeridad” — recortar y luego congelar los salarios del sector público, elevar impuestos, aumentar los impuestos de valor agregado, recortar los pagos de pensiones y elevar la edad de jubilación— para pagar los préstamos recibidos con un alto interés y, por lo tanto, empobreciendo al griego promedio. Poco después, en Grecia ocurrieron los disturbios planifi cados por el FMI, con resultados predecibles, incluyendo muerte.
La austeridad monetaria y fi scal son diseñadas para implementar la privatización y la llamada “liberalización”, una bonita palabra para eliminar las restricciones en los flujos de capital internacional, así como las restricciones de lo que las corporaciones y bancos transnacionales puede comprar, poseer y operar en el extranjero. Los banqueros logran esto al comparar la deuda y luego exigir un “reajuste estructural” que resulta en liquidaciones y la venta de tesoros nacionales y activos a la clase bancaria. En junio, el gobierno griego puso unas de sus 6,000 islas en el mercado.
“La deuda es una herramienta efi ciente. Asegura el acceso de otras personas a materias primas e infraestructura en los términos más baratos posibles”, escribe Susan George en A Fate Worse Than Debt. “Los grandes bancos y corporaciones multinacionales en particular aman al FMI”, escribe Ron Paul.
“Las grandes corporaciones obtienen contraltos lucrativos para una amplia variedad de proyectos de construcción financiados con préstamos del FMI. Es un juego familiar en Washington, donde el bienestar corporativo es disfrazado como compasión para los pobres”. La mayoría de las “naciones receptoras enfrentan grandes deudas que no pueden abordar, lo que solamente agrega pobreza e inestabilidad”, agrega Paul.
Ahora el FMI ha fi jado sus horizontes en el Gran Kahuna, Estados Unidos, y sus analistas han “estimado una serie de probabilidades respecto del monto de la creciente deuda que un país puede ser capaz de sostener sin llegar a un punto de no retorno”, informó el Washington Post en septiembre.
“En el caso de EE.UU., el fondo dijo que las probabilidades eran apenas tres de cuatro que el país aumente su deuda total a algún grado sin ser penalizado por los inversionistas”.
Según los cálculos del FMI, Estados Unidos terminó el 2009 con un ratio de deuda a PIB de 85 por ciento. “La tendencia actual proyecto que Estados Unidos termine 2010 con un 94 por ciento y 2011 con un 98 por ciento. El nivel de 90 por ciento se ha convertido en el punto de quiebre del FMI para los países que esperan crecer para salir de la crisis. Si la carga de deuda del gobierno sobrepasa el 90 por ciento del PIB, el crecimiento económico se desacelera tanto que el crecimiento ya no es una solución viable para reducir esa deuda, y el FMI insiste en las medidas de austeridad”, señala el Activist Post.
Parece que las medidas de austeridad y los nuevos esquemas tributarios están en construcción para Estados Unidos. Glenn Beck y la inteligencia RINO están todos por sacar más dinero de los trabajadores para pagar la interminable deuda de los banqueros. Beck está de acuerdo con el ex jefe de la mafi a de la Fed, Paul Volcker y la Junta Asesora de Recuperación Económica de Obama, dominada por Goldman Sachs. Es nuestro deber pagarles a los banqueros.
Parece que también EE.UU. obtendrá el mismo tipo de cortes y tribunales tributarios que propone el FMI para Grecia, ya que no hay un défi cit de leyes impositivas poco serias en Estados Unidos y no hay déficit de burócratas que idolatran al estado, ansiosos de llenar las prisiones y casas laborales penales, próximas a venir, con un nuevo grupo de víctimas. Kurt Nimmo edita Infowars.com. Es autor de Another Day in the Empire: Life In Neoconservative America .
