por Dr.Sofiya
Las diminutas flores parecidas a las margaritas de la planta de manzanilla, durante mucho tiempo han sido valoradas por sus propiedades medicinales. Por lo menos ya en la época romana, se utilizó la manzanilla en infusiones y extractos para promover la relajación y reparar el sueño, así como para apoyar la salud del sistema digestivo. Por vía tópica, se usa para igualar los tonos de piel y para poner de manifiesto aspectos más destacados en el cabello rubio o de color claro. Es un tratamiento popular para las condiciones mencionadas anteriormente, incluso hoy en día. Sin embargo, al parecer el poder curativo de la manzanilla va mucho más allá de la promoción de la función digestiva y sueño profundo. La investigación moderna también ha descubierto que los compuestos bioactivos en estas pequeñas flores perfumadas, también pueden ayudar a reducir las probabilidades de cáncer de tiroides. Si bien esta forma de cáncer a menudo puede ser tratada con éxito con cirugía, tratamiento con yodo radioactivo (o ambos), sería aún mejor evitar que se diera en el primera instancia! Echemos un vistazo a la investigación.
Nuevo estudio
El estudio que tiene a todos hablando es uno que fue publicado recientemente en la revista European Journal of Public Health. Se estudiaron tres grupos de voluntarios para esta investigación: El primero fue un grupo de 113 pacientes con cáncer de tiroides que se comparó con otro grupo de 138 pacientes sin cáncer y 286 pacientes que tienen antecedentes de enfermedad tiroidea benigna. Los tres grupos recibieron cuestionarios detallados a contestar para que los investigadores pudieran determinar factores tales como sus hábitos alimenticios diarios, historia médica general, el estilo de vida y consumo de bebidas (incluyendo el consumo de café y té).
Los resultados
Lo que los investigadores encontraron fue que los que consumían las mayores cantidades de té de manzanilla tuvieron probabilidades más bajas de desarrollar cáncer de tiroides. Y el porcentaje fue significativo: Una persona que consume 2-6 tazas de té de manzanilla en una base semanal tiene el 70 por ciento menos probabilidades de desarrollar cáncer de tiroides; si esta práctica hubiese ocurrido durante 30 años o más, era un 80 por ciento menos de probabilidades de sufrir la aparición de esta enfermedad.
Reacciones de los investigadores
Los investigadores que trabajan en este estudio señalaron que, si bien muchos estudios se han realizado para estudiar los efectos del consumo de té verde o negro y su relación con el desarrollo de la enfermedad, no hay estudios que hayan analizado los mismos efectos para los diferentes tipos de tés de hierbas. Señalaron que “nuestro estudio sugiere, por primera vez, que el consumo de té de manzanilla se vincula con una menor incidencia de cáncer de tiroides, así como con otras enfermedades tiroideas benignas”. Ellos creen que esta correlación entre el consumo de té de manzanilla y la reducción del riesgo de cáncer de tiroides se debe a uno de los componentes en la manzanilla llamado apigenina, que clínicamente ha demostrado propiedades anti-cáncer.
En resumen, esta investigación es importante porque identifica el consumo de infusiones, de ser un comportamiento saludable similar a la de consumir té verde sobre una base regular. También es la primera prueba de los médicos de la capacidad que tiene la manzanilla para luchar contra el cáncer de tiroides en lugar de ser utilizada exclusivamente para el insomnio o problemas digestivos. Con suerte, más investigaciones como esta se harán en el futuro para determinar los efectos saludables de otras infusiones también.