by Jonathan Benson
Natural News
Científicos de la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), un grupo afiliado a la Organización Mundial de la Salud (OMS), dice que los teléfonos móviles son un “posible” cancerígeno que puede causar cáncer.
Estos resultados, que apoyan investigaciones previas en el tema, se agregan a las crecientes evidencias que sugieren que la radiación electromagnética emitida de los móviles causa serios problemas a la salud. Además, un respetado panel internacional de científicos dice que es posible que los celulares sean agentes que causan cáncer, poniéndolos en la misma categoría que el pesticida DDT, agotamiento del motor de gasolina y el café.
“Una asociación positiva se ha observado entre la exposición al agente y el cáncer para lo cual una interpretación causal es considerada… creíble”, declara la IARC. Sin embargo, en la misma línea de pensamiento, la agencia sostiene que la evidencia es “limitada” para sugerir que el uso de teléfonos móviles esté ligado al glioma o neuroma acústico, dos tipos de cáncer cerebral.
En 2009, IARC publicó un estudio en el Journal of Clinical Oncology que ligaba el uso de teléfonos móviles a un aumento en 18 por ciento de riesgo de tumor cerebral. Y porque se observó que tales tumores tendían a formarse en los lados del cerebro donde principalmente se usan los celulares, la conexión entre ambos es más asombrosa (http://www.naturalnews.com/027448_c…).
Otro informe d e2010 de International Electromagnetic Field Cooperative (IEFC) también encontró una relación entre el uso de celulares y mayores tasas de tumores cerebrales. En este informe se incluye un estudio suizo que descubrió que había un 420 por ciento de aumento en tasas de cáncer cerebral entre los niños que comenzaron a usar celulares y teléfonos inalámbricos desde adolescentes, en contraste con quienes no (http://www.naturalnews.com/028078_c…).
Con toda esta investigación disponible y el más reciente anuncio de IARC, uno podría pensar que más personas estarían preocupadas por los riesgos involucrados con el uso excesivo de celulares y estarían buscando alternativas menos riesgosas o al menos usando aparatos manos libres. Pero como el período entre el que un paciente de cáncer se expone a esta radiación y cuando desarrolla tumores esde varias décadas, algunos expertos mantienen que la relación entre ambas no es definitiva y se contentan con decirle al público que no hay mucho de qué preocuparse.
