por Fernando A. Torres
Caridades Católicas informó que el nuevo centro de ayuda social denominado Punto de Acceso La Misión se unirá a sus programa de prevención de familias sin-casa y a los servicios de ayuda sobre inmigración en un nuevo local en el 3270 de la Calle 18 con South Van Ness.
La presencia de Caridades Católicas y sus programas sociales no es nueva en La Misión. Ya llevan mas de cincuenta años proveyendo servicios en el barrio latino mas grande del norte de California. Esta vez la nueva ubicación, unirá a todos los servicios sociales bajo un solo techo, para continuar brindando una “atención compasiva e integral a las familias e individuos que luchan por sobrevivir y prosperar”.
José Cartagena, director de programas, dijo que en la recién-inaugurada ubicación funcionaran los programas para ayudar a los sin-casa, inmigración y financiamiento para pagar arriendos. “Estamos muy contento de estar abriendo este centro de Punto de Acceso que es el centro, la conexión de familias sin-casa para recibir servicios en la ciudad. Nuestra función es establecer y ser el puente para que familias sin-casa puedan recibir los servicios que ellos necesiten, ya sea abrigo y refugio, ya sea referencias para vivienda de bajo costo, o programas de renta subsidiada”, dijo Cartagena.
Fundada en 1907, Caridades Católicas es parte de la arquidiócesis de San Francisco pero su accionar es independiente. Con el lema de “caridad y justicia” la organización fue creada en el Área de la Bahía para ayudar a los huérfanos del terremoto de San Francisco.
A la inauguración del local la semana pasada, asistieron diversas personalidades y oficiales de la ciudad. La alcaldesa London N. Breed dijo que el problema de los sin-casa es grande sobre todo en California. De todas las personas sin-casa en el país, el 24 por ciento está en California, dijo Breed.
“Este centro proveerá servicios no solo para las familias sin-casa que tristemente batallan en nuestras calles, pero también para nuestra comunidad de inmigrantes. Como sabemos, tenemos un Presidente que todos los días ataca a nuestra comunidad de inmigrantes… pero a pesar de estos ataques y las amenazas, continuaremos ofreciendo recursos para nuestra comunidad”, aseveró Breed.
La alcaldesa informó que este nuevo centro es parte de un sistema municipal coordinado de cinco centros para familias que han perdido sus hogares; para que entren a un sistema de ayuda de protección, albergue y vivienda permanente. La ciudad provee ayuda a 50 personas semanalmente y esperando en la fila “ hay otras 65 personas… Sabemos que los sin-casa representan un gran problema en todo el Estado”, por eso es importante encontrar “soluciones regionales” porque la ciudad San Francisco “no lo puede hacer por si sola”, dijo Breed.
El sacerdote de Iglesia San Carlos y Vicario Episcopal para los hispanos en la arquidiócesis de la ciudad Moisés Agudo, dijo que Caridades Católicas pretende llegar “a los mas marginados, a los que están mas indefensos. Familias que están perdiendo sus casas; familias que sufren el miedo e incluso el terror de salir a la calle. Todo hombre necesita vivir dignamente. Este centro se levanta como un centro que iluminara y potenciara la comunidad hispana. Que no tengan miedo, que salgan, que la iglesia esta con ellos”, dijo Agudo.
En una ciudad donde un departamento de un dormitorio vale 3 o 4 mil dólares; uno de los grandes problemas es económico dijo Cartagena. “Esto implica que muchas familias no pueden pagar un arriendo. La renta esta muy alta y el ingreso de la familia es mucho menos… Nos vemos obligados a tener que compartir un apartamento con tres o cuatro familias para poder sostener esto. Estamos hablando de familias inmigrantes latinas que ganan menos de mil doscientos dólares al mes; no es suficiente para pagar la renta y ahí se da el problema de los sin-casa”.
Cartagena concluyó que es mas económico mantener a esa familia en su departamento o casa que tener que costearles abrigo y refugio. El costo promedio para darle refugio a una familia es de entre 30 y 40 mil dólares. “Es mucho mas barato ayudarles a pagar la renta para que no sea desalojada… no nos sintamos mal porque necesitamos ayuda. No tengamos pena o miedo. Si necesitamos ayuda busquémosla. Hay programas como los nuestros y estamos aquí para servirlos”, dijo.
Jilma Meneses, Directora Ejecutiva de Caridades Católicas, dijo que la organización lleva mas de 150 años trabajando en San Francisco, Mari y San Mateo. Programas similares también se desarrollan en el barrio Bayview. La ciudad de San Francisco esta ayudando a financiar el centro. Pero las campañas de recaudación de fondos deben de continuar “para convertirlo en un proyecto viable y sostenible… Nosotros proveemos servicios a todos, sin importar la procedencia, su género, su color, su orientación sexual, su religión. Estamos en un lugar donde todos están seguros y bienvenidos. Ustedes son hermanos y hermanas sin importar su descendencia. Usted nunca será rechazado de nuestra familia… Yo soy una emigrante. Cuando era niña fui motivada por los servicios que yo y mi familia recibimos y ahora es un honor para mi devolver esto”, dijo Meneses.