lunes, diciembre 23, 2024
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¿Nos estamos convirtiendo en una nación totalitaria?

por Marvin J. Ramirez

Marvin J. RamirezMarvin J. Ramírez

A veces durante la hora de cierre de la edición, es difcil para un redactor que trabaja solo con muy poca ayuda, salir con una idea de última hora para escribir un editorial.

Este fue mi caso cuando estaba por enviar esta edicin a la imprenta. Simplemente no podía pensar de que escribir, me sent bloqueado por un rato.

Pero comencé a mirar alrededor en mis pensamientos y recordar como la mayor parte de las personas no pueden ver lo que realmente pasa a nuestro país hermoso.

Quizás no muchas personas en los Estados Unidos entienden el por qué muchas cosas no van yendo bien para la mayor parte de la ciudadanía: entre más usted trabaja, más endeudado usted está, y con miedo de caer al fondo del precipicio financiero. Parece que no vamos hacia ningún lado.

Entre más duro usted trabaja para comprar una casa siguiendo las reglas del juego, más usted encuentra más tarde que las reglas del juego no fueron hechas para protegerlo a Ud., el ciudadano trabajador, sino para proteger a alguna corporación invisible basada en algún sitio en otra parte del mundo, y que su propio gobierno no puede hacer mucho por usted. Sólo mira cuando usted es lanzado a la calle y es despojado de sus derechos fundamentales permitidos por nuestros Padres Fundadores de la patria.

Con esta intención, publico este artículo del autor Mark Nestman, que encontré hace algún tiempo, que espero le de una idea de lo que podría continuar siendo y lo que podría ser para nuestro futuro como nación de libertades civiles.

Pronto usted tendrá que perdir permiso antes de que usted vuele

El año pasado escribí que si el Tío Sam hace su capricho, todos estaremos en la lista de no-volar, a menos que el gobierno nos dé permiso para irnos – o para entrar de nuevo – a los Estados Unidos.

Ahora, la Administración de Seguridad de Transporte (TSA) propuso un sistema similar para viajes en líneas aéreas comerciales DENTRO de los Estados Unidos. Ambos sistemas entrarían en vigor el 19 de febrero de 2008.

Bajo la iniciativa del Sistema Pasajero Anticipado del TSA, el Sistema de Información (APIS), usted tendrá que obtener el permiso del gobierno estadounidense para viajar en CUALQUIER avión de pasajeros comercial o barco que va a o viene de los Estados Unidos. Usted no recibirá su tarjeta de embarque hasta que usted sea aclarado por el APIS. Usted también necesitará el permiso de viajar por los Estados Unidos (ej, si usted transborda aviones en un aeropuerto estadounidense para un vuelo entre dos países extranjeros). No importa si usted es un residente permanente o ciudadano estadounidense. Cada uno necesitará el permiso de entrar – o el permiso de salir – de los Estados Unidos.

Entonces, el 23 de agosto de 2007, el TSA publicó regulaciones propuestas para su programa de “Vuelo Seguro”.

El TSA quiere que las líneas aéreas comerciales presenten la información de pasajeros por una sola ventanilla del DHS, tanto para el Vuelo Seguro como para programas APIS. Esto resultaría en un solo sistema DHS responsable de vigilar de que la lista de todos los pasajeros de aviación hagan juego con otras.

Naturalmente, el proceso entero – tanto para viajes domésticos como para internacionales – ocurrirá en total secreto.

Si a usted se le niega viajar, usted no podrá apelar la decisión a cualquier tribunal. Su único recurso será a través de la burocracia del TSA. Esencialmente, usted será reducido a súplicas con el TSA para decir algo como, “por favorcito, déme una tarjeta de embarque”.

A lo qué esto asciende es esencialmente a una nueva réplica del sistema “pasaporte interno infame” en efecto en la antigua Unión Soviética. En 1933, el dictador soviético Josef Stalin introdujo “pasaportes internos” que prohibieron a los ciudadanos soviéticos dejar su lugar de residencia sin permiso.

Con el tiempo, el pasaporte interno se convirtió en el instrumento principal de la opresión soviética sobre sus ciudadanos. Está bastante mal el pedir al Tío Sam permiso para dejar los Estados Unidos, y entrar de nuevo. Pero un pasaporte interno es un cianotipo del totalitarismo.

Mark Nestman, Experto en Privacidad y es presidente de The Group Nestmann www.nestmann.com. Este art culo fue escrito en 10-4-7.

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