por Salvadoreños en el Mundo
Washington, DC – Cerca de un centenar de salvadoreños congregados ayer 24 de septiembre en la ciudad de Washington en la Primera Cumbre de Liderazgo Salvadoreño Americano, organizados en grupos, visitaron a unos 42 congresistas y senadores de Estados Unidos para pedir apoyo a un proyecto de reforma migratoria integral que de cobertura a cerca de 12 millones de inmigrantes indocumentados, de los cuales 1,000,000 podrían ser de origen salvadoreño.
Los activistas savadoreños solicitaron a legisladores demócratas y republicanos de ambas cámaras del Congreso revisar la posibilidad de introducir un acuerdo de ley que facilite la obtención de residencia permanente a más de 220 mil salvadoreños que tienen Estatus de Protección Temporal (TPS).
Lincoln Díaz-Balart, congresista republicano de Florida, dijo a representantes y a líderes de la Diáspora, que es difícil introducir otra pieza de ley paralela, mientras no se haya definido “la propuesta definitiva” sobre el complejo sistema migratorio en los EE.UU.
A pesar de todo, el legislador Lincoln Díaz-Balart y su hermano Mario Díaz-Balart, también representante en la cámara baja por el estado de Florida, afi rmaron que su voto estaría a favor de una reforma migratoria integral e incluyente no que no rompa y destruya familias.
Por su parte, Francisco Rivera, Presidente de Salvadoreños en el Mundo (SEEM), dijo que Estados Unidos debe reflexionar sobre el rol de los inmigrantes y hacer distinciones sin pasión a la hora de tratar la maleta de indocumentados que vive en ese país.
De los 11.5 millones de inmigrantes indocumentados en este país, la abrumadora mayoría es gente trabajadora, no delincuentes, que merecen una oportunidad, acotó el presidente de SEEM. Funes pide en la ONU “el voto de nuestros hermanas y hermanos en el exterior.”
El Presidente de El Salvador, Mauricio Funes, se subió al podio de las Naciones Unidos en Nueva York y ahí abogó por el voto de los salvadoreños en el exterior.
Además del sufragio para los migrantes, el mandatario salvadoreño habló de los grandes problemas de su país, en los que resaltó la delincuencia, la inseguridad, la emigración, y lo que está haciendo su gobierno para intentar resolverlos.
Funes dedicó una buena parte de su discurso para hablar especialmente del problema migratorio y de la fuga de talento y mano de obra de El Salvador que ha marcado registros alarmantes en los últimos 20 años.
La emigración “es un desgarramiento familiar difícil de sobrellevar y la evidencia permanente de que no hemos podido crear las condiciones necesarias para retener a nuestros hijos en casa y de que no alcanzaremos nunca a realizarnos individual y colectivamente como sociedad si no curamos esta mala herida” lamentó el mandatario.
Sobre la inclusión de los migrantes que el nuevo gobierno tiene prevista, Funes detalló que va involucrarse a fondo para que los salvadoreños en el exterior pueden votar sin importar el punto geográfi co de residencia.
“He pedido a los partidos políticos, a los intelectuales, académicos y magistrados, a elaborar las bases de un acuerdo político nacional que impulse las reformas necesarias para ampliar y fortalecer la democracia, transparentar la vida de los partidos políticos y mejorar el desempeño de la justicia electoral nacional, así como, y este es un punto esencial de mi petición, que garanticen el derecho al voto de nuestras hermanas y hermanos en el exterior” sentenció el presidente Funes.