sábado, diciembre 28, 2024
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Hotel del migrante – donde los deportados encuentran refugio en Mexicali

­por David Bacon

New America Media

Sentado en la cama de su cuarto en el Hotel Migrante cerca de la frontera, Gerardo fue deportado días antes de los EE.UU.: (PHOTOS BY DAVID BACON)Sentado en la cama de su cuarto en el Hotel Migrante cerca de la frontera, Gerardo fue deportado días antes de los EE.UU.  (PHOTOS BY DAVID BACON)

­MEXICALI, México— El año pasado, casi 400,000 personas fueron deportadas de Estados Unidos. Es la ola de deportación más grande en la historia de EE.UU., incluso más grande que la conocida “Operation Wetback” de los 1950s, o las deportaciones masivas durante la Gran Depresión.

Generalmente la Patrulla de Frontera vacía buses de deportados en las puertas fronterizas de ciudades tales como Mexicali en medio de la noche, empujando a la gente en un momento cuando nada está abierto y no hay servicios disponibles para brindarles alimento o refugio. La mayoría de los deportados son jóvenes. No tienen dinero en sus bolsillos al venir de Estados Unidos, y no tienen nada cuando son deportados de regreso a México.

Son personas invisibles. En la ola de histeria anti-inmigrante presente en Estados Unidos, nadie pregunta qué ocurre a los deportados una vez que son enviados de regreso a México.

En Mexicali, un grupo de deportados y activistas de derechos de los inmigrantes han tomado un viejo hotel abandonado, anteriormente el Hotel Centenario. Lo han rebautizado el Hotel Migrante. Apenas a una cuadra del cruce fronterizo, les da a las personas deportadas de Estados Unidos un lugar donde dormir y comer por algunos días antes de regresar a casa, o tratar de cruzar la frontera de nuevo. El gobierno no les da nada. Border Angels, un grupo de derechos de los inmigrantes en EE.UU., les brinda un el poco de apoyo que recibe el hotel. Una cooperativa de deportados cocina y trabaja en arreglar el edificio.

Durante el invierno, unas 50-60 personas viven ahí en un momento específico, mientras cinco o seis más golpean a sus puertas cada noche. El verano pasado, en el peak de la temporada cuando las personas trataron de cruzar la frontera mientras buscaban trabajo, el número de deportados buscando refugio en el hotel se elevó a más de 300.

­“Muchas personas resultaron dañadas tratando de caminar a través de las montañas alrededor de Mexicali”, dice Benjamin Campista, un miembro de la cooperativa. “Hace mucho frío ahí ahora, y cuando son capturados y deportados, muchos solamente están usando una camiseta y zapatillas. Algunos se enferman, a ésos los llevamos al hospital. El resto se queda aquí algunos días hasta que su familia pueda enviarle dinero para regresar a casa, o hasta que decidan intentar cruzar nuevamente”.

Border Angels y el colectivo del hotel acordaron pagar al terrateniente 11,000 pesos en una renta mensual (unos $900 USD), pero ya están atrasados en seis meses. Cada día los residentes del hotel van hacia las largas filas de personas que esperan cruzar la garita (el cruce de frontera legal). Piden dinero para apoyar el hotel, y cada persona se queda con la mitad de lo que les dan. La otra mitad va sobre todo para comida para la noche. Los deportados tienen mucho tiempo para explicar su situación a las personas que esperan en línea, ya que en una tarde reciente el tiempo de espera para llegar a la garita era de dos horas.

Cada día Campista escucha a los deportados contar sus historias. “Tres hermanos se quedaron aquí el verano pasado, antes de que intentaran cruzar. Un mes después uno regresó. Lo vi en el techo, llorando mientras miraba las montañas donde los otros dos habían muerto por el calor. Una mujer vino aquí con su bebé de dos meses de edad. Su marido había muerto en el desierto también”.

“¡Somos seres humanos!”, exclama Campista.

“Solamente vamos al norte para tratar de trabajar. ¿Por qué debemos morir por esto? Nuestros gobiernos debieran terminar estas violaciones a los derechos humanos. Entonces nuestro hotel no sería siquiera necesario.

http: / /newamericamedia.org/2010/12/the-migrant-hotel—where-deportees-findshelter.php.

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