por Margine Quintanilla
Gerardo Sandoval posa con miembros de la comunidad latina en la Misión. (photos by Marvin J. Ramirez)
El pánico de ser enjuiciado en una corte lleva a muchos latinos a permitir abusos y chantajes de otros. Además de no entender el sistema judicial, muchos enfrentan jueces que no entienden su cultura y no hablan español.
“Los latinos estamos sub-representados en el Poder Judicial”, es la frase con la que explica mejor esta situación el candidato a juez para la Corte Superior de San Francisco.
Sandoval explica que actualmente el 30 por ciento de los jueces son republicanos, mientras otros vienen de poderosas firmas legales. Sólo el 2 por ciento es hispano, y muchos otros ni siquiera viven en San Francisco”, dijo.
Sandoval, quien está terminando su segundo término como Supervisor de San Francisco, goza del respeto y admiración de diversos líderes de la comunidad latina, quienes reconocen en él dotes que lo califican como el mejor candidato para ocupar el puesto de juez.
Los padres de Sandoval, oriundos de una pequeña ciudad de México, emigraron a Estados Unidos hace 58 años formando un humilde hogar donde Gerardo era el menor de la familia.
Se destacó como un estudiante ejemplar obteniendo su título de abogado en la universidad de Columbia, Nueva York, institución que ha formado seis jueces de la Corte Suprema estadounidense y dos presidentes.
Pero la pasión por la justicia fue cultivada en el corazón de Sandoval desde muy temprana edad.
“Mi padre era un jardinero y mi madre era una costurera. Ellos me enseñaron a trabajar con fuerza en el servicio de la comunidad”, cita en su biografía.
Durante los últimos años se ha desempeñado en el cargo de Supervisor de San Francisco, y ahora lo abandona debido a límites de término.
En el 2002, contrajo nupcias con la Sra. Amy Harrington, con quien formó un hogar y tu tuvo dos niñas Natalie y Julia.
Cuando le preguntan a Sandoval por qué quiere ser juez, él sonríe y explica: “Primero porque tengo pasión por la justicia. Pero tengo tres motivos que hacen más importante este deseo, cumplir mi compromiso del servicio público, mejorar nuestros tribunales, y aclarar que necesitamos tribunales que prioricen “el compromiso de servicio público” antes de los intereses políticos y económicos de los poderosos.
Plan de trabajo: En su plan de trabajo, él propone cambiar los tribunales.
“Como juez, seré firme en el castigo de aquellos que son violentos, sobre todo aquellos que usan armas de fuego. Pero como un líder, prometo pensar en métodos que permitan una verdadera rehabilitación de los privados de libertad.
También espera hacer más accesibles y fáciles de entender “las Salas de los Tribunales Civiles”, para el ciudadano medio. “Reduciré tardanzas y gastos a pequeños litigantes”.
Sólo dos de 67 jueces y comisarios son hispanos, en una ciudad donde los latinos forman una parte importante de la población.
“Esto no es sólo una pérdida a la democracia. Esto es también una pérdida de confianza para aquellos sanfranciscanos que usan los tribunales”.
