El evento se describe como una invitación a reflexionar sobre lo que comemos y el impacto que tiene sobre el medio ambiente
por los servicios de noticias de El Reportero
¿Interesado en explorar oportunidades gastronómicas en el mundo de los insectos? Una próxima exposición probablemente proporcionará toda la información necesaria.
El arte de comer insectos «se abre en el Colegio San Ildefonso de la Ciudad de México el 9 de octubre para resaltar las comunidades que consumen insectos, así como la historia y la sostenibilidad futura de la práctica.
Incluirá 180 piezas de 23 colecciones de investigación, que incluyen ilustraciones científicas, pinturas, objetos históricos, fotografías, videos y presentaciones en medios mixtos.
También se exhibirán muchos especímenes de insectos comidos en México, como saltamontes, atacantes (como en cortadores de hojas), hormigas melíferas, escamoles (huevos de hormigas), chicatanas (hormigas voladoras que aparecen después de las primeras lluvias) e insectos acuáticos. llamado ahuautle, entre otros.
En una conferencia de prensa celebrada para anunciar el evento se dijo que hay 1,950 insectos comestibles en el mundo, de los cuales México incorpora 545 en su cocina como parte de las dietas tradicionales.
La curadora de exposiciones de San Ildefonso, Carmen Tostado Gutiérrez, dijo que la idea para la exhibición surgió de conversaciones con la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) sobre el patrimonio cultural de México y un creciente interés en comer insectos.
Sin embargo, su objetivo es crear una conciencia histórica y ecológica de lo que comemos.
«Es más que una invitación a comer insectos», dijo Tostado, «se trata de saber de dónde viene esta tradición culinaria, cómo se creó a lo largo de la historia. . . Es más una invitación a reflexionar sobre lo que comemos y el impacto que tiene sobre el medio ambiente, cuestionando nuestro papel, consumo y actitudes personales a diario».
El coordinador ejecutivo de San Ildefonso, Eduardo Vásquez Martín, destacó el objetivo de la exposición como un homenaje al medio ambiente y para mostrar al público el papel que juegan los insectos en él. Espera que la exhibición anime a más personas a probar recetas mexicanas de insectos.
La exposición también tendrá talleres de ilustración para niños, cursos para el público en general y clases de modelado de insectos en 3D, todo con el objetivo de contribuir a la solución de la degradación ambiental.
Funcionará de martes a domingos de 10 a.m. a 6 p.m. hasta el 2 de febrero.
Fuente: El Universal (sp)
Comienza simposio sobre el Joropo en Venezuela
Un simposio sobre los diferentes géneros del joropo, el ritmo nativo venezolano, comienza este sábado en la sede del Centro para la Diversidad Cultural en esta capital.
Durante el día, especialistas como Milagros Figueroa, Carlos García, Jesús ‘Chuito’ Rangel, Monico Márquez y José ‘Cheo’ Hurtado, hablarán sobre el este de Joropo y Guayana.
Benito Irady y Alexander Lugo presentarán el debate, que incluirá numerosos testimonios audiovisuales de músicos conocidos de los estados de Nueva Esparta y Sucre.
Mientras tanto, otras presentaciones abordarán el joropo central, el jorconeao, el andino, el colono, el occidental, el llanero y muchas más variantes que existen en varias regiones del país.
A partir de esta mañana, un panel compuesto por intérpretes virtuosos y académicos del género oriental aportará ideas para extender esta variante del joropo venezolano a la región de Guayana.
El joropo, una forma tradicional de música y danza que identifica completamente al pueblo venezolano, ahora es un símbolo de identidad nacional y sus orígenes se remontan a mediados de la década de 1700, cuando los campesinos venezolanos preferían usar el término ‘joropo’ en lugar de ‘fandango’. ‘para referirse a fiestas y reuniones sociales y familiares.
Fandango es un término español, que identifica una de las canciones y bailes más populares dentro del flamenco, y de ahí parece haber tomado el nombre de expresión musical y danza. El género se caracteriza por su mestizaje, la expresión más auténtica del venezolano, que mezcla el ritmo de la melodía, el acompañamiento del arpa y el cuatro, y letras de influencia europea, al tiempo que identifica la presencia de la huella negra e indígena.
No es solo un estilo musical, también es un baile, y representa un festival popular, un baile alegre que divierte y reúne a sus participantes, y en cada área geográfica toma su propia esencia, desarrolla diferentes pasos y figuras, además de los básicos que los identifican.