by Sandeep Godiyal
Desde hace algún tiempo los investigadores saben que el aceite de pescado es altamente benéfico para la salud humana óptima. Estos beneficios incluyen mejor salud cerebral, lo que es el motivo de que muchos fabricantes de sustitutos de leche infantil no vacilan en añadir DHA y los ácidos grasos de Omega 3, aminoácidos que se encuentran en altas cantidades en el pescado, a sus productos. Una investigación reciente ha demostrado que estos beneficios contribuyen al desarrollo cerebral de los pequeños y pueden ayudar a la gente de todas las edades a disfrutar un aumento dramático de la salud de su cerebro.
Muchos necesitan ayuda para lesiones traumáticas cerebrales
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que hay aproximadamente 1.7 millones de lesiones cerebrales al año que pueden clasificarse como traumáticas. La investig5ación reciente subraya el uso de grandes cantidades de aceite de pescado, que es muy alto en los ácidos grasos omega 3, para ayudar en los casos de lesión cerebral clasificada como severa.
Lesión cerebral severa de adolescente desafía probabilidades
Un caso único es el de Grant Virgin. El joven de 16 años de Palm Desert, California, fue herido por un golpe de un vehículo que se dio a la fuga. Sus lesiones resultantes eran severas, teniendo que ser trasladado en helicóptero y canalizado a un centro de trauma de los alrededores. A los padres de Grant se les dio una larga lista de sus lesiones que incluía la aorta rota, fracturas de la espina y lesión cerebral traumática consistente en sangrado a lo largo del cerebro y fracturas en el cráneo.
El pronóstico de Grant era sombrío –sus doctores esencialmente dijeron a sus padres que no había nada que hacer por el adolescente. Nunca más podría caminar, ni sería capaz de reconocer a los miembros de su familia. Casi no había esperanza de que se recuperara.
Grant pasó nueve semanas de cuidado intensivo en el centro de trauma antes de que fuera derivado a un hospital de rehabilitación. Fue entonces cuando sus padres comenzaron a administrarle altas dosis –20 gramos– de aceite de pescado al día. Si bien se lo habían administrado mientras estaba en cuidado intensivo, la dosis no había sido tan alta.
Resultados dramáticos
Después de 48 horas, Grant despertó, pidió un teléfono celular y llamó a su madre a la media noche. Ella estaba tan aturdida que pensó que estaba soñando hasta que visitó el hospital al día siguiente y descubrió que una enfermera había ido a buscar un teléfono celular para el uso de Grant la noche anterior. Ahora, aproximadamente a 16 meses del accidente, Grant sigue progresando en su recuperación.
También promesa para el cerebro maduro
Los cerebros en desarrollo de los infantes y los adolescentes no son los únicos que han demostrado beneficios por el uso del aceite de pescado. Neurology, un periódico de medicina, publicó recientemente los resultados de un estudio que demostró que las mujeres maduras a las que se les administró altas dosis de omega 3 tenían un mejor funcionamiento cerebral.
Independientemente de la edad del individuo, el aceite de pescado constituye una gran promesa para aumentar la salud de su cerebro.