por Disclosed TV
Este conjunto de documentos de 1966 revela una red de agencias gubernamentales en colaboración perpetua y secreta entre sí, y con los militares para Modificar el Clima Global.
Creada por la elitista Academia Nacional de Ciencias –algunas décadas de una cultura inter-agencia secreta explican por qué la cuestión encubierta de la geo-ingeniería de aerosoles es un tema tabú que es degradado a la condición de “teoría de la conspiración” por una matriz de burócratas cómplices en cada oportunidad. Esta es la razón por la que nuestro “servicio metereológico” televisivo rara vez hace un comentario sobre un cielo inusual con persistentes huellas de jets. TÍTULO: “La Evolución del Programa R&D de Cambio Climático en un Sistema de Armas Militares”. Una Crítica de 1986 de la iniciativa de 1966.
http://www.fas.org/man/eprint/leitenberg/weather.pdf
Este documento aparece como un borrador anónimo destinado a una crítica del Programa de los Estados Unidos de Cambio Climático que el autor caracteriza como pirateado del sistema de armas militares. Jules Verne escribió sobre hacer geo-ingeniería del clima de la tierra en 1889 en una secuela de De la Tierra a la Luna llamada “La compra del Polo Norte”.
Verne escribe que el Club de Pistolas de Baltimore compró grandes tramos del Ártico que entonces usó el famoso canon de De la tierra a la luna para inclinar el eje de la Tierra. El objetivo era establecer un paraíso tropical como jugosa atracción turística en el Polo Norte, al tiempo que “mejorar” el clima global del planeta.
Si Verne predijo correctamente que el hombre podría viajar de la tierra a la luna, no es de sorprender que también predijera que un pequeño grupo de hombres influyentes considerara calentar el clima para obtener ganancias.
Verne pudo haberse inspirado en el geologista de Harvard Nathaniel Shaler, quien propuso derivar las aguas tibias del Atlántico al Ártico en 1877 –una docena de años antes de que fuera publicada la “fantástica” historia de Verne. Calentar el Ártico con proyectos de geo-ingeniería a gran escala era la visión de los industrialistas de hace 100 años –y aún lo es.
¿Recuerda cuando los Científicos Pensaron que el Calentamiento del Ártico era una buena idea? Harry Wexler (15 de marzo, 1911-1962) era un graduado de MIT y PhD en meteorología. Wesler estuvo investigando el vínculo entre los componentes de la clorina y la bromina y la destrucción de la capa de ozono de la estratósfera, pero murió de un ataque al corazón cuando estaba de vacaciones en Woods Hole, Mass. Wesler ya había aceptado una invitación a enviar una conferencia titulada “El Clima en la Tierra y sus Cambios” en el Instituto de Investigación Espacial y Tecnología de la Universidad de Maryland. Wesler era el último de una larga fila de ambiciosas propuestas para calentar el Ártico.
Como una coincidencia, sus propuestas fueron hechas al mismo tiempo que la Academia Nacional de Ciencias estaba trabajando para elaborar un programa de modificación del clima –una dirección en que los militares ya se habían embarcado en 1958.
Las iniciativas del “Calentamiento Global” propuestas por Wexler: – Para aumentar la temperatura global de la Tierra en 1.7°C “mediante la inyección de una nube de cristales de hielo en la atmósfera polar a través de la detonación de 10 bombas de H en el océano Ártico –el tema de su artículo de 1958 en la revista Science (Wesler H, 1958, “Cambiar el Clima a Gran Escala”, Science, n. 128 [oct. 31, 1958]: 1059-1063). – Para disminuir la temperatura global en 1.2°C, podría lograrse “lanzando un anillo de partículas de polvo en la órbita ecuatorial, una modificación de una anterior propuesta rusa para calentar el Ártico”.- Para destruir la capa de ozono y aumentar abruptamente la temperatura de la superficie terrestre, rociando “algunos cientos de miles de toneladas de clorina o bromina” con un avión estratosférico. Fleming, 2007(a), pp. 56-57; Fleming, 2007(b), “nota n. viii” p. 9 & p. 5 (fuente).
La decisión de revertir la dirección del calentamiento al enfriamiento del Ártico fue anunciada en 1963 –el año siguiente de la muerte de Wesler, cuando el Comité de Ciencias Atmosféricas de la Academia Nacional de Ciencias recomendó la organización de un Panel de Cambio Climático. Las propuestas de Wesler de calentar el planeta nunca fueron mencionadas de nuevo, pero siguieron siendo muy populares entre las partes interesadas en los mercados de petróleo y energía que siempre han buscado oportunidades para nuevas rutas marítimas y de perforación tan pronto se derritiera un poco el hielo.
En vista de la posición de la NASA de que las estelas persistentes de agua creadas por el hombre están exacerbando el calentamiento global, ¿qué debemos pensar? Si estas nubes hechas por el hombre son vapor de agua normal, tenemos un problema que acelera el calentamiento global. Pero si el problema puede arreglarse, y ninguna autoridad gubernamental ha pensado aún en la importancia de emprender una acción inmediata, podemos asumir razonablemente que el calentamiento del clima con estelas persistentes es un resultado tolerable, e incluso deseado. Y si se revela que las nubes creadas por el hombre son aerosoles químicos rociados deliberadamente en la atmósfera, podemos asumir que el calentamiento de la atmósfera es una agenda oculta dentro de una operación encubierta de aerosol que simula la apariencia de un plan de geo-ingeniería para enfriar el planeta.
En realidad, las operaciones químicas de aerosol brindan una posible denegabilidad a los espectadores de que los gobiernos benevolentes están rociando secretamente los cielos para probar maneras de mitigar el calentamiento global por el bien de la humanidad.
Esta posible denegabilidad se nos enseña a través de la cobertura de los medios de geo-ingenieros como David Keth, quien presenta estrategias de “enfriamiento” con aerosol en frecuentes apariciones públicas que son –en su turno– presentadas como noticia en muchas fuentes mediáticas. Así, la agenda de calentar el planeta es claramente oculta en un disfrazado pero revelado programa de gobierno para probar el rociado de aerosol para enfriar el planeta si decidimos que es necesario.
Mientras tanto, el hielo del Ártico continúa retrocediendo a pesar de las décadas de “pruebas”. Los aerosoles no son lo único que se requiere en tecnología avanzada de cambio climático. Los calentadores ionosféricos de alta energía, Tesla Arrays, exóticos dispositivos electromagnéticos, también se requieren para interactuar con aerosoles químicos de maneras como nunca lo harían las estelas de vapor de agua normal.
