por Erick Galindo
El debate por el sistema de salud se ha vuelto un match de empujones, y los inmigrantes, legales y otros, son los que más están siendo castigados.
La admisión del Presidente Obama de que la reforma a la inmigración tendrá que esperar hasta el próximo año gatilló los temores de que, mientras un quinto de las 45 millones de personas sin seguro en el país son inmigrantes, los beneficios de la reforma a la inmigración no los cubrirán.
“Estamos críticamente preocupados”, dijo Jennifer Ng’andu, vicedirectora del Proyecto de Política de Salud del Consejo Nacional de La Raza, a Weekly Report.
“No hay provisiones actualmente que extiendan los beneficios públicos a los inmigrantes indocumentados, y ahora los inmigrantes legales están en peligro de perder algunos beneficios”.
Obama dijo a Hispanic Link y a otros nueve miembros de los medios invitados a una discusión de “mesa redonda” sobre temas relacionados con los hispanos que la animosidad relativa a ambos temas será difícil de superar en el presente.
“Creo que, respecto del debate que se está llevando a cabo relativo a la reforma de salud, no será posible brindar cobertura a los inmigrantes indocumentados”, dijo Obama.
Además, señaló que la cobertura de salud ya ha sido extendida a 11 millones de niños, incluyendo los indocumentados.
“Fue una lucha que estuvo ahí por una década. Fue un gran logro”, dijo.
Una batalla de semanas para el apoyo público de la reforma propuesta se ha intensificado mientras los miembros del Congreso han enfrentado a rudas multitudes, con gritos hostiles y exigentes matches en las reuniones en las alcaldías por todo el país.
Muchos detractores han dejado claro que no les gusta el “plan de Obama” porque es un “socialista”. Alentado por grupos tales como la Cámara de Comercio de EE.UU., el partido político Libertarian y conductores de radio derechistas, la indignación y arrebatos en estas reuniones son parte de una estrategia de la oposición para perturbar el mensaje de la administración. Los partidarios de la reforma han reaccionado, enviando a sus propios miembros para contrarrestar.
La inmigración fue thrown into the fray cuando grupos nativistas tales como Federation for American Immigration Reform hicieron un fuerte lobby por la exclusión de los inmigrantes ilegales.
“Incluirlos en el plan es injustificado y sumaría billones al precio”, dijo Dan Stein, presidente de FAIR.
“En Pennsylvania y por todo el país el público está enojado de manera comprensible a causa de los asombrosos costos de la inmigración y se oponen firmemente a brindar un completo rango de benefi cios de salud a los inmigrantes ilegales”.
Ng’andu de NCLR dice que la noción de que los inmigrantes legales solamente pagan impuestos no es correcta.
“Los inmigrantes pagan impuestos, como todos”, agregó. “Todos deberían estar integrados y deberían compartir la responsabilidad”.
Estos temas candentes se intersectan más allá de 160C Ave. Pennsylvania.
Mientras el programa de Massachusetts Commonwealth Care se ha convertido en un modelo de reforma, la legislatura estatal votó el mes pasado para dejar de cubrir a los inmigrantes documentados con menos de cinco años en su tarjeta verde— la totalidad de los 30,000.
El Senador de Pennsylvania Arlen Specter quien cambió su registro de Republicano a Demócrata este año dijo que no apoyará la legislación de salud que cubra a los inmigrantes indocumentados.
En el pasado, Specter apoyó una legislación de camino hacia la ciudadanía, pero aseguró a una escandalosa multitud en una reunión en la alcaldía el12 de agosto en Lebanon, Pennsylvania., que “ninguno de los proyectos en el Congreso brindaría un seguro de salud a los inmigrantes ilegales”.
En California, los debates sobre el sistema de salud y la inmigración siempre han estado entrelazados.
En febreros, varios países, incluyendo al fuertemente latino condado de Sacramento, comenzó a recortar el cuidado de no emergencia a los indocumentados, arguyendo restricciones financieras.
El Immigration Policy Center, pro-inmigrante, dice que el tema está siendo usado como “una forma para enterrar un palo en las ruedas de la reforma inminente”.
Obama reaccionó, “En lo que se refi ere a los inmigrantes legales, entonces mi actitud es que de la misma manera que el Programa de Seguro de Salud para los Niños hizo sentido, deberíamos intentar brindar ayuda a los que están aquí legalmente.
“No queremos que los niños, o sus padres, estén en un patio con tuberculosis y no tengan acceso a ningún servicio de salud”. Hispanic Link.
