por Tania Branigan en Beijing y Heather Stewart guardian.co.uk
Los analistas temen que el movimiento de Beijing pueda sugerir una pérdida de fe en la política económica del gobierno norteamericano.
China vendió $34bn en bonos del gobierno de EE.UU. en diciembre, aumentando los temores de que Beijing está usando su músculo financiero para señalar que perdió confianza en la política económica norteamericana.
Las cifras del tesoro de EE.UU. para el período que termina en diciembre de 2009 muestran que, tras la venta, China ya no es el principal titular de bonos de EE.UU. en el extranjero. Beijing terminó el año con $755.4bn en valor de la deuda del gobierno de EE.UU., en comparación con los $768.8bn de Japón.
Desde que la crisis de las sub-prime que comenzó en Main Street USA creció para hundir la economía global, los líderes de China han repetidamente expresado sus preocupaciones respecto de la política de EE.UU. La venta en diciembre de $34bn es sólo una minúscula parte de los títulos norteamericanos totales de Beijing, los que llegan a más de $1tn cuando se consideran acciones en empresas norteamericanas y billetes del tesoro.
Pero las noticias intensificaron las preocupaciones del apetito de China por financiar los crecientes déficit civiles, bienestar social y otros — a los estados.
Los opositores notaron la autoridad constitucional del gobierno federal por sobre el comercio interestatal, la cual ha usado el Congreso para poner en marcha leyes de largo alcance.
Los Demócratas que argumentaron contra la resolución notaron que el estado equilibra su presupuesto y se preocupa de las personas a través de Medicare y Medicaid usando dólares federales. También dijeron que las protecciones civiles del gobierno federal son clave. La Sen. Luz Robles, D-Salt Lake City, atribuyó a las protecciones federales el hecho de que ella — una latina — pudiera ascender al Senado nacional.
El Sen. Gene Davis, D-Salt Lake City, votó por el proyecto, pero cuestionó si es que los que han apoyado la medida realmente quieren financiar Medicaid y otros programas solos, porque o si no el mensaje es en vano.
“Si a alguien lo relaja, lo hace sentir que puede golpearse en el pecho o levantarse los calzones, creo que es una resolución bastante buena”, dijo Davis.
Otros dijeron que no es un mensaje vacío, sino uno clave. El Sen. Wayne Niederhauser, R-Sandy, lo calificó de uno de los temas más importantes del Legislativo porque el sistema del gobierno está volviéndose inapropiadamente de lo general a lo particular. El Sen. Chris Buttars, R-West Jordan, dijo que el gobierno federal está excediendo su “nicho” constitucional.
“El gobierno federal no es un soberano”, dijo Buttars. “Nosotros lo somos. Es hora de que nos enfrentemos a esos matones”.
“Los estados crearon el gobierno federal”, dijo la Sen. Margaret Dayton, R-Orem, “y realmente es hora de que le pongamos un collar a la creatura”.
Algunos Demócratas apoyaron la resolución, pero dijeron que no pueden apoyar otros proyectos que desafíen específicamente al gobierno federal de manera que los abogados del Legislativo crean que no se sostendrán en la corte. Finalmente, sólo Robles, la Sen. Karen Morgan, D-Cottonwood Heights, y el Sen. Ben McAdams, D-Salt Lake City, votaron contra la resolución.
El presidente del Senado Michael Waddoups dijo más tarde que los líderes legislativos están dispuestos a financiar una defensa legal de uno o más de los proyectos de derechos de los estados, que podrían llevar a desafíos constitucionales. Dijo que los legisladores deberían elegir lo que tenga más probabilidades de tener éxito, en vez de defender todos al mismo tiempo.