La Depresión de los Bankeros de los años 1930
NOTA DEL EDITOR: Esta es la tercera parte de una serie del artículo “Billones para los banqueros – deuda para el pueblo”. La primera parte abordó la historia de la deuda nacional de Estados Unidos a principios de los 1900s. La segunda de esta serie de varias partes, mostró cómo el control del dinero ha jugado un rol clave esclavizando a los norteamericanos al privarlos de la propiedad privada y el dinero, mientras los banqueros son dueños de todo. La tercera parte detalla los eventos desde la Depresión de los 1930s. El Reportero está orgulloso de publicar este artículo, escrito por el Pastor Sheldon Emry para saber más sobre la historia del dinero en Estados Unidos.
por Pastor Sheldon Emry
En 1930 a Estados Unidos no le faltaba capacidad industrial, tierras fértiles, trabajadores capacitados y con disponibilidad en familias trabajadoras.
Tenía un extensivo y eficiente sistema de transporte en caminos de fierro, redes de carreteras y pasos acuáticos en tierra y en el océano. Las comunicaciones entre las regiones y las localidades eran las mejores del mundo, se usaba el teléfono, el teletipo, la radio, y un sistema de correo gubernamental bien operado.
Ninguna guerra había hecho estragos ni en las ciudades ni en el campo, ninguna plaga había debilitado la población ni había habido hambre. A los Estados Unidos de América de 1930 le faltaba solamente una cosa: un abastecimiento adecuado de dinero para continuar con el comercio.
A principios de los 1930s, los banqueros, la única fuente de dinero nuevo y crédito, se negaron deliberadamente a dar préstamos a industria, tiendas y granjas. Los pagos de los préstamos existentes eran requeridos, sin embargo, y el dinero desaparecía rápidamente de la circulación. Los bienes estaban disponibles para ser comprados, los empleos esperaban a ser generados, pero la falta de dinero llevó a la nación a estar paralizada.
Con esta simple treta, Estados Unidos fue puesto en una “depresión” y los banqueros tomaron posesión de miles de granjas, hogares y propiedades de negocios. Se le dijo a la gente, “el momento es malo” y “el dinero es escaso”. Sin entender el sistema, a ellos se les robó cruelmente sus ingresos, ahorros y propiedades.
No hay dinero para paz, pero mucho para guerra
La Segunda Guerra Mundial terminó la “depresión”. Los mismos banqueros que a principios de los 1930 no tenían préstamos para hogares, alimentos y ropa en tiempos de paz, de pronto tenían billones ilimitados para prestar para barracas del ejército, raciones K y uniformes.
Un país que en 1934 no podía producir alimentos para la venta, de pronto podía producir bombas para enviar gratis a Alemania y Japón! (Más sobre este acertijo más adelante).
Con el repentino aumento de dinero, las personas fueron contratadas, las granjas vendieron su producción, las fábricas usaron dos turnos, las minas reabrieron y “La Gran Depresión” había terminado!
Algunos políticos fueron culpados por esto y otros se llevaron el crédito por terminarlo. La verdad es que la falta de dinero (causada por los banqueros) trajo la depresión y el dinero adecuado la terminó. A la gente nunca se le dijo esa simple verdad y en este artículo queremos mostrar cómo esos mismos banqueros que controlan nuestro dinero y crédito han usado su control para saquear el país y esclavizarnos.
Poder para Acuñar y Regular el Dinero
Cuando podemos ver los desastrosos resultados de una escasez de dinero creada artificialmente, podemos entender mejor por qué nuestros Padres Fundadores, quienes comprendían el dinero y las Leyes de Dios, insistieron en establecer el poder para “crear” dinero y controlarlo SÓLO en las manos del Congreso Federal.
Creían que TODOS los ciudadanos deberían compartir las ganancias de su “creación” y por lo tanto el gobierno Federal debiera ser el único creador de dinero. Creían que todos los ciudadanos, de cualquier estado, territorio o estación en la vida, se podrían beneficiar de una moneda estable y adecuada. Por lo tanto, el gobierno Federal debe también ser, por ley, el único que controle el valor del dinero.
Ya que el Congreso Federal era el único cuerpo legislativo sujeto a todos los ciudadanos en las urnas, era, en sus mentes, el único depositario seguro de tantas ganancias y tanto poder. Escribieron de una manera simple, pero inclusiva: “el Congreso debe tener el poder para Acuñar Dinero y Regular el Valor del mismo”.
— La próxima semana, Cómo perdimos el control de la reserve Federal, Más desastroso que Pearl Harbor y Billones en Intereses que se les deben a los bancos privados.