por Ellaine Castillo
Muchos alimentos amargos han demostrado ser increíbles súper alimentos. Tomemos, por ejemplo, las hojas verdes oscuras, las calabazas amargas, el chocolate oscuro y la moringa. En comparación con los otros en la lista, la moringa (Moringa oleifera) es menos popular, pero esto no significa que no sea tan buena. De hecho, esta planta es comúnmente llamada árbol milagroso porque todas sus partes, incluidas las semillas, las vainas y las hojas, presentan muchos beneficios para la salud.
El árbol de la moringa es originario del norte de la India, donde su semilla se incluye comúnmente en la dieta tradicional de la gente, al igual que en otros países asiáticos y africanos. Esta planta altamente nutritiva se puede usar para muchas aplicaciones, incluida la producción de biodiesel, la fabricación de productos de belleza y la filtración de agua. Sin embargo, todavía se usa más comúnmente por sus diversos beneficios para la salud, que incluyen lo siguiente:
Mejora de la desnutrición: una taza de semillas de moringa es suficiente para brindarle más del doble de la ingesta diaria recomendada de vitamina C y casi cuatro veces la cantidad de hierro que necesita. También está lleno de potasio, magnesio, calcio, carbohidratos y proteínas, que tienen 19 de los 22 aminoácidos, que son esenciales para el crecimiento y el desarrollo. Con todos estos nutrientes, usted esperaría que las semillas de moringa tengan un contenido alto en calorías, pero no lo hacen. Debido a su asombroso contenido nutricional, muchas naciones en desarrollo lo están convirtiendo en un alimento básico para evitar y tratar la desnutrición. Afortunadamente, la moringa es muy fácil de cultivar ya que vive a través de la sequía y los climas cálidos.
Reduce la inflamación y el estrés oxidativo: las semillas de Moringa son ricas en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios. La presencia de estos compuestos hace de este súper alimento un tratamiento prometedor para las condiciones asociadas con la inflamación y el estrés oxidativo. Estudios previos en ratones y humanos demostraron que la moringa mejora significativamente los síntomas de la colitis ulcerosa, una afección caracterizada por una inflamación crónica y úlceras en el tracto digestivo. Para maximizar el potencial antioxidante de las semillas de moringa, intente hervirlas antes de comerlas, ya que se dice que libera compuestos beneficiosos.
Mejora la salud del corazón: la moringa es una buena fuente de grasas monoinsaturadas saludables que reducen el colesterol malo y, en consecuencia, reducen el riesgo de enfermedades del corazón. Estudios previos también han demostrado que las semillas de moringa protegen a las células del corazón del daño inducido por el estrés oxidativo y la inflamación excesiva. Además, este súper alimento reduce los niveles de triglicéridos en el cuerpo y mejora la frecuencia cardíaca y la función cardíaca en general.
Promueve la buena digestión: si está buscando un alimento rico en fibra, las vainas de moringa serían la mejor opción para usted. Cada cápsula contiene aproximadamente 47 por ciento de fibra, por lo que es ideal para personas que sufren problemas digestivos como el estreñimiento.
Regula los niveles de azúcar en la sangre: las personas a las que se les ha diagnosticado diabetes o prediabetes pueden beneficiarse de comer moringa. Este superalimento puede disminuir los niveles de azúcar en la sangre debido a los isotiocianatos que contiene. Los estudios han demostrado que 50 gramos de hojas de moringa en una sola comida pueden reducir significativamente el azúcar en la sangre en un 21 por ciento.
Combate el cáncer: las personas que comen semillas de moringa tienen un menor riesgo de desarrollar diferentes tipos de cáncer, incluidos el cáncer de hígado, mama y colon. Funciona al prevenir el crecimiento y la propagación de las células cancerosas. (Relacionado: Se encontró que las semillas de moringa previenen la propagación de las células de cáncer de mama al tejido circundante). Natural News.