por Mexico News Daily
El arancel del 50 por ciento de Estados Unidos sobre las importaciones de acero y aluminio —que entró en vigor hoy— es “injusto”, “insostenible” y “no tiene fundamento legal”, declaró este miércoles la presidenta Claudia Sheinbaum.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, dijo el martes que México buscará una exclusión de dicho arancel, que duplica el gravamen del 25 por ciento que Estados Unidos impuso a las importaciones de acero y aluminio en marzo. Si no se logra una exclusión, el gobierno mexicano anunciará su respuesta la próxima semana, afirmó Sheinbaum.
El presidente estadounidense Donald Trump anunció el viernes pasado su plan de duplicar el arancel a las importaciones de acero y aluminio.
“Lo llevaremos del 25 por ciento al 50 por ciento —los aranceles sobre el acero que ingresa a Estados Unidos, lo cual asegurará aún más a la industria acerera de nuestro país”, dijo en un evento en Pensilvania.
Trump firmó una orden ejecutiva para imponer el arancel más alto el martes.
“He determinado que es necesario aumentar los aranceles previamente descritos sobre el acero y el aluminio para ajustar las importaciones de artículos de acero y aluminio y sus derivados, de modo que tales importaciones no amenacen con perjudicar la seguridad nacional”, expresó Trump en la orden.
“A mi juicio, los aranceles aumentados contrarrestarán con mayor eficacia a los países extranjeros que siguen inundando el mercado estadounidense con acero y aluminio barato y excedente, debilitando así la competitividad de las industrias nacionales de estos metales.”
Una hoja informativa de la Casa Blanca señaló que Trump está “tomando medidas para poner fin a las prácticas comerciales desleales y al dumping global de acero y aluminio”.
“Las naciones extranjeras han estado inundando el mercado estadounidense con acero y aluminio barato, a menudo subsidiado por sus gobiernos”, indicó la Casa Blanca.
El año pasado, Estados Unidos y México anunciaron una serie de medidas destinadas a frenar la evasión de aranceles anteriores sobre acero y aluminio, especialmente dirigidas a productos provenientes de China que se envían a través de México.
El nuevo arancel del 50 por ciento, al igual que el del 25 por ciento que reemplaza, fue impuesto de acuerdo con la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de Estados Unidos, en lugar de la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA), que Trump ha utilizado para imponer aranceles separados a la mayoría de los países del mundo, incluido México.
Según datos de 2024 del Departamento de Comercio de EE.UU., México es el segundo mayor exportador mundial de acero, aluminio y productos derivados de estos metales hacia Estados Unidos. El valor de esas exportaciones mexicanas fue de 34.83 mil millones de dólares el año pasado, solo superado por China.
Sheinbaum: ‘Es una medida que consideramos injusta’
Sheinbaum respondió a la implementación del arancel más alto en su conferencia matutina del miércoles.
“Es una medida que consideramos injusta”, dijo a los periodistas.
“Es una medida para todo el mundo, no solo para México, el arancel se incrementa para todos los países del mundo con excepción del Reino Unido, que se mantiene en 25 por ciento”, explicó Sheinbaum.
“… En el caso de México, en primer lugar, es injusta … porque como hemos dicho en varias ocasiones, México importa más [de Estados Unidos] de lo que exporta en acero y aluminio. Formalmente, se impone un arancel cuando hay un déficit”, argumentó.
“… En segundo lugar, desde nuestra perspectiva, no tiene fundamento legal porque hay un tratado comercial”, dijo Sheinbaum en referencia al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Señaló que Estados Unidos impuso el arancel por motivos de seguridad nacional, pero destacó que “ayer la vocera de la Casa Blanca dijo que hay una buena colaboración con México en todos los términos, incluyendo el tema de seguridad”.
“Así que no creemos que haya fundamento” para imponer el arancel a las importaciones de México, agregó.
También dijo que un arancel al acero y aluminio mexicano es “insostenible porque, como ocurre con los automóviles”, productos que contienen acero cruzan la frontera durante el proceso de producción.
Sheinbaum indicó que discutiría el tema con representantes de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero de México este miércoles, y señaló que Ebrard se reuniría con funcionarios estadounidenses el viernes.
Afirmó que si México no logra un acuerdo con Estados Unidos, su gobierno anunciará su respuesta —pero no una “ojo por ojo”— la próxima semana.
“Nuestra responsabilidad es primero proteger el empleo de los mexicanos, y segundo [proteger] a la industria del acero. Un arancel del 50 por ciento representa un impacto muy grande para la industria del acero”, dijo Sheinbaum.
“… No estamos de acuerdo [con el arancel], no creemos que sea justo ni sostenible porque eleva el precio de todo. Esperamos llegar a un acuerdo”, comentó.
Ebrard: Arancel al acero tendrá que ajustarse porque el impacto económico será ‘muy grande’
Ebrard dijo a periodistas el martes que no cree que el arancel del 50 por ciento pueda mantenerse a largo plazo.
“Como ha ocurrido con otros aranceles [de EE.UU.], tendrá que ajustarse porque el impacto económico es muy grande”, señaló.
De hecho, Trump ha realizado varios cambios a los aranceles que ha anunciado desde su regreso a la Casa Blanca en enero. Al hacerlo, y para su disgusto, surgió el acrónimo TACO —“Trump always chickens out” (Trump siempre se echa para atrás).
Ebrard calificó el arancel del 50 por ciento sobre el acero y aluminio mexicano como “injusto para México porque Estados Unidos tiene superávit” en el comercio de esos metales.
“No tiene sentido imponer un arancel a un producto en el que tienes superávit”, reiteró.
El secretario de Economía dijo que solicitará formalmente una exclusión del arancel cuando se reúna con funcionarios estadounidenses en Washington D.C. este viernes.
“¿Cómo veo esta medida? La veo como injusta, insostenible e inconveniente”, expresó.
Ebrard ha estado intentando negociar condiciones comerciales más favorables entre México y Estados Unidos durante meses, y ha realizado viajes frecuentes a Washington desde que Trump inició su segundo mandato.
Antes de que se duplicara el arancel al acero y aluminio, ya intentaba obtener una exención del gravamen del 25 por ciento sobre esos metales, así como del arancel estadounidense sobre autos extranjeros.
Está por verse si Ebrard logrará obtener concesiones del gobierno estadounidense en su reunión del viernes.
Además de los aranceles al acero, aluminio y autos, los productos mexicanos no cubiertos por el T-MEC también enfrentan aranceles del 25 por ciento al ingresar a Estados Unidos.
La semana pasada, el Tribunal de Comercio Internacional de EE.UU. dictaminó que Trump excedió su autoridad al usar la IEEPA para imponer aranceles relacionados con el tráfico de fentanilo a productos no cubiertos por el T-MEC, pero el gobierno estadounidense apeló rápidamente la decisión y obtuvo una suspensión del fallo del tribunal comercial.
Por Peter Davies, redactor jefe de Mexico News Daily (peter.davies@mexiconewsdaily.com)
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