por Marvin J. Ramírez
En una declaración de Joe García, el director de la Nueva Red Democrática (NDN) este mes, él enfatizó que un asunto, la cuestión de inmigración, es un área en la cual el Presidente, los senadores John McCain, Harry Reid, Nancy Pelosi, la Iglesia Católica, la Cámara de Comercio, numerosos sindicatos y muchos otros grupos de bases fue capaz de hacerlos encontrar la causa y trabajar: el plan de McCain-Kennedy de reforma de inmigración completa que pasó el Senado con el amplio apoyo de los dos partidos en 2006.
Este acuerdo, sin embargo, no ha sido capaz de sobrevivir, ya que muchas otras propuestas han sido redactados por grupos de presión, tan confusos para los defensores y las comunidades inmigrantes, que dejan a millones en expectativa.
“Poniendo a flote un acercamiento muy nuevo a la reforma de inmigración, el Presidente y su partido han caminado hacia atrás e ideado un nuevo camino que hará mucho más para complacer a sus partidarios políticos que solucionar este problema importante,” dijo García.
Él pidió al Presidente Bush que actúe pensando en una solución completa sobre el tema de inmigración, y no siga la dirección de su partido.
“El presidente tiene que distanciarse públicamente del plan puesto a flote por líderes republicano del Senado y decir ahora mismo que él tiene la intención de proseguir donde acabamos en 2006 – con el plan de McCain-Kennedy que ha pasado ya el Senado cuando era controlado por los republicanos”, dijo García.
Esta inacción por nuestros legisladores muestra la incompetencia de nuestro Congreso, y que fieles son a grupos de presión que quieren conservar de una u otra forma, una fuerza laboral subterránea, sin derechos y sin supervisión del departamento del trabajo. Esto es básicamente una forma de esclavitud, comentó un cadete de policía afro-norteamericano mientras yo hablaba en la Academia de Policía de San Francisco hace tres semanas, dirigiéndome a los futuros oficiales.
“Algo menos que esto mostrará que el presidente, a pesar de su retórica apasionada de hoy en día, es que simplemente no está serio sobre el paso de la reforma de inmigración completa este año,” añade García.
El plan nuevo y defectuoso de los Republicano puesto a flote, dijo García, desenmarañará esta coalición, y dará un golpe severo a aquellos que esperan que pase la reforma de inmigración completa este año.
Es obvio que el Presidente está positivo y esperanzado de que la reforma de inmigración tiene que ser completa, escribió a Janet Munguía, presidenta y oficial en jefe del Consejo Nacional de La Raza.
“Pero ya es tiempo que el presidente comience a actuar para hacerla pasar. Aún también debemos tener presente que la ventana de oportunidad se está cerrando rápido.
Y para que esto suceda, cada parte interesada a la cuestión de inmigración debe de estar de acuerdo que el Congreso debe pasar la legislación de reforma de inmigración antes del receso de agosto.