por el CF Editor en Jefe
Casi todos los demócratas del Senado votaron el lunes a favor de una legislación que habría ampliado radicalmente el derecho al aborto incluso más allá del fallo de la Corte Suprema en Roe v. Wade.
La Ley de Protección de la Salud de la Mujer habría obligado a todos los estados a permitir abortos por cualquier motivo hasta al menos el punto de viabilidad, generalmente definido alrededor de los seis meses de embarazo, y habría prohibido la mayoría de las restricciones sobre el aborto hasta el momento del nacimiento.
Todos los republicanos votaron en contra del proyecto de ley y todos los demócratas, excepto el senador Joe Manchin, votaron a favor, informó NBC News.
La WHPA habría invalidado todas las leyes estatales y locales que restringían qué tipos de procedimientos de aborto están permitidos, al tiempo que prohibiría los requisitos de que los médicos realicen pruebas médicas a las mujeres, como ecografías, antes de administrar abortos, a menos que dichos requisitos también se aplicaran a «procedimientos médicamente comparables».
El proyecto de ley proponía varias medidas de desregulación que habrían flexibilizado los requisitos de seguridad en todo el país para los proveedores de servicios de aborto, como poner fin a las restricciones a los médicos que recetan píldoras a través de la «telemedicina» para realizar abortos químicos caseros.
El aborto es un procedimiento utilizado “principalmente por mujeres”, explicó el proyecto de ley antes de justificar el uso de la palabra “mujer”, y señaló que los “hombres transgénero” y las “personas no binarias” también necesitan el derecho al aborto.
“Las decisiones de las mujeres sobre el cuidado de la salud de las mujeres pertenecen a las mujeres, no a las legislaturas de extrema derecha”, comentó el senador Chuck Schumer, quien calificó el aborto como un “derecho fundamental”.
Jeane Mancini, presidenta de la Marcha por la Vida, dijo que era la legislación sobre el aborto más radical en la historia de Estados Unidos. “Obviamente, este proyecto de ley está diseñado por políticos a favor del aborto para apaciguar al lobby del aborto. Los legisladores, independientemente de su afiliación partidaria, deben rechazarlo”, comentó.
El proyecto de ley es un aparente intento de codificar el fallo de la Corte Suprema en Roe v. Wade, que está siendo reconsiderado por la Corte y podría anularse potencialmente en junio.
