por los servicios de noticias de El Reportero
El 1 de febrero las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberaron a cuatro rehenes a la senadora de la oposición Piedad Córdoba y una comisión del Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC).
Más tarde ese mismo día, un auto bomba en la ciudad de Cali en el sudoeste, mató a dos personas e hirió al menos a 17. La respuesta del Presidente Álvaro Uribe a la explosión ha sido intransigente: le prohibió a Córdoba, el principal punto de contacto de las FARC, participar en la liberación de los dos últimos rehenes civiles, planificada para el 2 y 4 de febrero.
Uribe está decidido a evitar que el maltrecho grupo use las liberaciones de rehenes para recuperar un apalancamiento político y está enviando un mensaje claro de que su gobierno no cederá a las presiones de ataques terroristas renovados.
Su decisión puede, sin embargo, ser impopular: todavía no está claro si las FARC cooperarán sin Córdoba, por lo tanto, el proceso de liberación ha sido temporalmente llevado a un limbo.
Un debilitado Castro lanza primer golpe a Obama
LA HABANA – El jueves, Fidel Castro lanzó su primer golpe contra el Presidente Barack Obama tras semanas de elogios para el nuevo líder, exigiendo el regreso de la base militar de la Bahía de Guantánamo por parte de EE.UU. a Cuba y criticando la defensa de EE.UU. hacia Israel.
El ensayo más reciente de Castro, publicado en un sitio web ofi cial, vino una semana después de que califi cara a Obama de “inteligente y noble” y dijo que cortaría sus escritos para evitar interferir en las decisiones del gobierno cubano.
La misiva del jueves generó nuevas preguntas respecto del rol que él mantiene en las decisiones políticas, especialmente mientras su hermano, el Presidente Raúl Castro, estaba en Moscú en una visita ofi cial.
El enfermo ex presidente de 82 años escribió que si EE.UU. no entrega su base en Guantánamo a Cuba, será una violación al derecho internacional y un abuso del poder norteamericano contra un país pequeño.
El presidente de EE.UU. debe “respetar esta norma sin ninguna condición”, escribió Castro.
EE.UU., que adquirió Guantánamo hace más de 100 años, lo considera estratégicamente importante para mantenerlo. El tratado que otorga su uso perman ece en efecto, a menos que tanto Cuba como EE.UU. lo revoquen o EE.UU. abandone la base. En su ensayo del jueves, Castro también criticó a Obama por apoyar la defensa de Israel contra los ataques por militantes palestinos. Dijo que demostró “el carácter abusivo del poder del imperio” e insistió que contribuiría con el “genocidio contra los palestinos”.
(Latin Briefs y Associated Press contribuyeron con este informe).