por Christina E. Rodríguez
CHICAGO — Más de 400 personas respondieron al llamado del Rep. de EE.UU., Luis Gutiérrez (D) para dar testimonio por alguien que conocen — un vecino, amigo, familiar u otro cercano— quien está al borde de la deportación. Sus historias obtienen voz, pero de las bocas de otras personas que los conocen. Se intenta llamar la atención sobre su sufrimiento, crear conciencia pública y, finalmente, traer reforma.
Los testigos vinieron a la Iglesia St. Pius V en el barrio Pilsen de Chicago el 15 de noviembre y testificaron durante más de tres horas. Unos 60 voluntarios apuntaron nombres y edades de individuos que dependen de aquéllos que están siendo deportados.
Gutiérrez dijo que está compilando una hoja de datos de esta información para pasársela al Presidente electo Barack Obama y acelerar una exhaustiva reforma a la inmigración, que lleva a la introducción de una nueva legislación en el Congreso.
“Nuestro gobierno debiera trabajar para mantener las familias unidas, no destruirlas”, dijo Gutiérrez.
Entre los testimonios hay historias de familias con miembros que han sido deportados.
Ana, hablando a nombre de su marido deportado, dijo “Marchamos, votamos, obtuvimos el presidente que queríamos.
Ahora tienen que trabajar por nosotros y mantener sus promesas”.
Julie Savitt, quien presenció cómo ocho agentes de Inmigración y Aduanas (ICE) rodearon su casa para arrestar a su marido Adam, habló sobre lo que significa perder a su compañero y el sostén de la familia.
“La deportación de un ser querido es como la muerte sin resolución”, dijo Savitt, quien estaba acompañada por sus tres hijos cuando habló.
Voluntarios como Myrna García, una estudiante de doctorado de la Universidad de California- San Diego, que ahora vive en Cicero, Ill., identifi có el esfuerzo de Gutiérrez como uno entre muchos que son esenciales para abordar los temas.
“Espero que algo suceda, pero es verdaderamente complicado”, dijo. “Esto tiene que ser una estrategia entre muchas”.
El concejal Manny Flores de la Primera Sala, quien ha trabajado con el Congresista Gutiérrez, observó, “Hemos sido muy proactivos al brindar el tipo de políticas locales e iniciativas legislativas que aseguran que protegemos a todos los miembros de nuestra comunidad”. Destacó que quería unirse en el esfuerzo de comprometer a Barack Obama en la necesidad de una reforma a la inmigración y la reunificación familiar.
“Esperamos que el presidente electo, Barack Obama sea muy fuerte al abordar estos temas. Entonces en el largo plazo podremos lograr algún tipo de exhaustiva reforma a la inmigración”.
El concejal Billy Ocasio, de la 26ma Sala, presiona para un cese inmediato de las redadas de ICE y barridos entre los inmigrantes indocumentados para deportación. “Esto es sólo el comienzo.
Apenas estamos tocando la punta del iceberg”, dijo. “Hay tantas familias en el mismo caso, donde una persona es indocumentada entre una familia de ciudadanos y el gobierno los está dividiendo”.
Ocasio, quien preside el comité de relaciones humanas del consejo de la ciudad, dijo que espera que las palabras de Obama hacia la comunidad inmigrante sean genuinas. La ciudad de Chicago, prometió, “no cooperará con nada que tenga que ver con deportaciones o redadas”.