por Juliana Birnbaum Fox
En medio de una fuerte protesta del mayor sindicato laboral de la ciudad, la Junta de Supervisores de San Francisco aprobó un presupuesto de $6.4 millones para el próximo año por un voto de 10 – 1. El Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU), preocupado por los despidos y los recortes de servicios, manifestó su oposición fuera de la reunión en el Ayuntamiento. El presupuesto es el más grande en la historia de la ciudad, y se las arregló para evitar el despido de más de 1,000 trabajadores al rebajar drásticamente los fondos para una variedad de servicios de la ciudad.
En un esfuerzo para abordar el défi cit de aproximadamente $338 millones, el presupuesto hace cortes signifi cativos en programas de la ciudad, aumentando las tarifas para muchos servicios existentes y creando otros nuevos para programas de recreación, servicios de ambulancia e inspecciones de salud. A diferencia del presupuesto federal, el presupuesto de la ciudad debe ser equilibrado por ley.
“Armamos un presupuesto que refleje la compasión colectiva que es San Francisco”, dijo el Supervisor Jake McGoldrick, presidente del Comité de Presupuesto y Finanzas de la junta, dijo en la reunión del martes. “Ninguno de nosotros lo obtiene todo, muchos de nosotros obtienen algo”.
A pesar de los recortes, algunos funcionarios ya están estimando que el presupuesto del próximo año tendrá un déficit de $250 millones, una cifra que podría elevarse si los legisladores estatales o federales sacan más dólares de San Francisco de lo que los líderes de la ciudad están estimando. En noviembre, los votantes de la ciudad decidirán sobre varias medidas que también impactarán en el número.
Los Supervisores rechazaron el plan del Alcalde Newsom de contratar a guardias de seguridad privados en vez de los empleados por la ciudad en los hospitales San Francisco General y Laguna Honda, tal vez debido a la presión de los sindicatos laborales. Para contrarrestar los $5 millones que el plan de guardias de seguridad de Newsom habría ahorrado, es posible eliminar los financiamientos para otros programas en vez de sumergirse en la piscina de dinero reservada para emergencias.
“El dinero está ahí para financiar estos servicios”, opinó Ed Kinchley, un miembro de la junta del Local 1021 de SEIU que representa a unos 12,000 trabajadores. “Pero el Alcalde y el Comité de Presupuesto prefi eren gastarlo en otros 55 ejecutivos asalariados de seis cifras en vez”.
Aproximadamente 140 puestos a tiempo completo fueron eliminadas, pero muchas estaban vacantes. Unas 30 personas podrían perder sus empleos, según el departamento de recursos humanos de la ciudad.
Robert Haaland, coordinador politico de SEIU 1021, dijo a San Francisco Chonicle que cree que habrá un número signifi cativo de empleados que jubilarán este año y los despidos serán innecesarios.
El mayor beneficiario del presupuesto, el Departamento de Salud Pública, obtendrá más de $1.5 billones. Casi $2.4 billones van hacia los departamentos de obras públicas, transporte y comercio, incluyendo la Agencia de Transporte Municipal, el Aeropuerto Internacional de San Francisco y la Comisión de Servicios Públicos. Los servicios de seguridad pública, tales como la policía, bomberos y cortes obtendrán más de $1 billón.
El Supervisor Chris Daly fue la voz disidente en la votación de la semana pasada, que volverá a la Junta para otra aprobación final la próxima semana. Daly criticó el proceso en general, diciendo que la oficina del alcalde tiene diferencias con la junta relativa a muchas de las políticas presupuestarias.