por Marvin J. ramirez
Marvin J. Ramirez
¿Cómo se siente cuando el proyecto de tus sueños ha llegado a 17 años largos? Puedo decirles, ¡maravilloso! Muchos predijeron que esto no duraría mucho tiempo.
Pero porque soy un creyente de que cada uno de nosotros es un creador, que lo que creamos con nuestra mente y resolución, simplemente se hace por operación de ley.
Nunca vi un fracaso. Cada semana yo empezaba, y sigo comenzando la siguiente edición tan pronto como la actual fue enviada a la imprenta. Tenga o no el presupuesto. Sólo sigo trabajando y trabajando, lo cual sera porque es el mejor empleo que he tenido en toda mi vida J Fue hace 17 años, en marzo de 1991, cuando las comunidades de San Francisco y el Área de Bahía vieron la primera edición de The Reporter, que es como se llamaba en aquel entonces (ver la imagen aquí).
Era todo en inglés, y en ese entonces no se me había ocurrido aún producir una publicación bilingüe. Sin embargo, porque mi periodista padre, José santos Ramírez Calero, no sabía inglés, él sugirió que yo debería hacerlo bilingüe. No me dijo por qué, pero mi intuición me sugirió cual era su razón: él quería que sus amigos mayores en el Centro Latino – donde él comía el almuerzo casi a diario – y él mismo, por supuesto, pudieran leer el trabajo periodístico de su hijo. Él, fallecido el 12 de junio de 2004, estaba muy orgulloso de mí.
Antes de esto, cuando fui a recoger la primer edición a la imprenta – en la Calle 16, y conducía en ruta a la Universidad Estatal de S.F. para distribuirlo allí, me paré en la intersección del semáforo de la Misión y la 26. Vi a un grupo de viejos amigos que estaban de pie en la puerta de la licorería Golden Gate, de Barnes Gómez (q.d.e.p.).
Allí estaba Gómez, quién falleció hace dos años, charlando con algunos de sus amigos personales. En aquel momento se me ocurrió darles una copia del periódico. Salí del coche y les traje unas copias del The Reporter, y después de hacerlo, vi que se había convertido en un periódico comunitario. Mi idea original era hacerlo un periódico universitario, para los latinos de la Universidad.
La primera edición, como ustedes pueden ver en la gráfica, estaba mal presentada. Yo aprendía apenas mis primeros pasos en el diseño de periódico. Me faltaban casi dos años para graduarme con el grado de Licenciado en Periodismo.
En aquel momento vi un nuevo horizonte en mi vida. Desde entonces me entregué a mi nuevo proyecto, y comencé a cubrir la crónica de la mayor parte de la vida de la comunidad latina dentro de mis propias limitaciones, por supuesto.
Hoy quiero agradecer a cada uno de mis anunciantes por estar todavía con nosotros durante estos largos años. Unos han estado apoyando fi elmente este esfuerzo, este trabajo de amor al servicio de todos ustedes, durante la mayor parte de estos 17 años.
Cada año le pedimos solidarizarse a nosotros, a todos nuestros lectores y comerciantes colocando su tarjeta de presentación o un anuncio de su negocio para congratular este esfuerzo en la promoción de nuestras ediciones de Aniversario.
Y le pedimos otra vez ayudarnos con un anuncio en un esfuerzo de generar ingresos que se necesitan para seguir sirviéndole. Durante las próximas semanas estaremos promoviendo nuestras ediciones de 17 Aniversario.
