por los servicios de noticias de El Reportero
La campaña del “Sí”, liderada por el gobierno, ganó por estrecho margen el reférendum sobre el tratado de libre comercio entre América Central, la República Dominicana y EE.UU. (CAFTA-DR) el 7 de octubre. La brecha fue menor a 50,000 en un resultado decente de cerca del 60 por ciento del electorado.
El Presidente Oscar Arias, quien fue electo en 2005 con la promesa de ratificar el acuerdo firmado en 2004, reconoció la fuerza de la oposición con un discurso conciliatorio cuando el resultado fue declarado. Los líderes de la campaña del “No”, sin embargo, desafiaron la votación y exigieron un recuento. Los observadores internacionales dijeron que no había problemas obvios en las elecciones.
Calderón se sale de la pista
Felipe Calderón Hinojosa se está volviendo impredecible. En política económica, ha confundido a los neoliberales ortodoxos, no sólo al introducir, sino extender, los controles de precios. En política exterior, está alejando a México de EE.UU. y acercándolo a América Latina. En América Latina, México está buscando acercarse a Venezuela y Cuba.
El patio trasero de nadie
La bienvenida de alto perfil para recibir al presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad durante su visita a Bolivia y Venezuela fue un desaire consciente a las metas de política exterior de George Bush y Tony Blair.
Esto es parte de una tendencia a largo plazo, mientras América Latina se 1mueve hacia la izquierda y se desencanta cada vez más con las políticas de occidente en los años recientes. Sin duda, muchos de los sentimientos expresados por los gobiernos más radicales también son compartidos por los de los moderados y subrayan la pérdida de influencia que Washington está teniendo en lo que solía considerar su “propio patio trasero”.
La semana pasada, Brasil mencionó que apoyaba el derecho de Irán de desarrollar energía nuclear, en oposición a las sanciones impuestas en la dictadura militar de Burma.
Mientras la visita del presidente iraní a Bolivia fue orientada a abrir las relaciones diplomáticas entre ambos países, Irán ya tiene relaciones con Chile, México, Brasil, Ecuador y Argentina, entre otros. Mientras el ministro del exterior de Brasil, Celso Amorim, recientemente visitó Irán, durante una conferencia de prensa conjunta con el Presidente Bush en Camp David, Lula defendió públicamente a Irán como “un importante socio compercial”, con quien Brasil “no tiene divergencia política”.
Rechazando los llamados de EE.UU. de rehuir del régimen de Irán, Lula insistió, “continuaremos trabajando juntos en lo que es nuestro interés nacional”.
Lula también defendió el derecho de Irán de desarrollar energía nuclear por medios pacíficos en la asamblea general de la ONU, mientras otros líderes latinoamericanos fueron más lejos. El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, preguntó retóricamente: “Aunque no quieran poder nuclear con fines pacíficos, ¿qué les da (a Estados Unidos) el derecho de cuestionarlo?” (Guardian Unlimited)