por Kenneth Burt
La dura realidad que la política y la guerra van intercaladas se evidencia en la decisión del Caucus Hispano del Congreso por presionar al cineasta Ken Burns a incluir a latinos en su documental sobre la segunda guerra mundial a emitirse por la cadena de televisión pública PBS.
Los latinos formaron parte del conflicto desde el comienzo ya que el ataque de los japoneses sobre Pearl Harbor le costó la vida a Rudolf Martínez, de San Diego. Se reconoció ampliamente el valor de los latinos en el campo de batalla en Asia y en Europa, y fueron los que ganaron el mayor número de Medallas de Honor del Congreso que cualquier otro grupo étnico.
De igual importancia, 3los veteranos que volvían mostraron liderazgo en las comunidades de costa a costa en lo que lucharon por sobreponerse a la discriminación y a jugar un papel más activo en la vida cívica.
No es ninguna coincidencia que después de la segunda guerra mundial los primeros latinos en servir en cargos de alto perfil tanto nombrados como elegidos en estados como California fueran veteranos.
El congresista Edward R. Roybal es veterano. Lo fueron también los primeros dos latinos elegidos a la Legislatura Estatal de California, John Moreno y Phil Soto.
Además de su servicio público, los veteranos como Roybal fundaron la Community Services Organization y la Mexican American Political Association en California.
El servicio militar les ofreció una formación en cuanto al liderazgo imposible de valuar. El GI Bill (ley de apoyo a los veteranos) les posibilitó asistir a la universidad, comprar una casa o establecer un negocio.
La calificación de veterano también dio acceso a un valor universal que les facilitó el alcance más allá de la comunidad latina en busca de apoyo cuando surgían los problemas.
Así fue el caso en Three Rivers, Texas, después que el mortuorio se negara a enterrar al soldado Félix Longoria, quien muriera luchando por la liberación de las Islas Filipinas.
El doctor Héctor García, quien por su parte había servido de médico militar, se valió del patriotismo por triunfar sobre la discriminación en apelar exitosamente al senador Lyndon Johnson por ayuda en enterrar a Longoria en el cementerio nacional de Arlington, Virginia.
El incidente de Longoria llevó a la formación del American GI Forum como una asociación para los veteranos mexicano-americanos.
Bajo la dirección del doctor García, el GI Forum se organizó en unos veinticuatro estados y se convirtió en una influencia política nacional de mucha importancia.
Durante la década de los 1950, la organización animó a los latinos a pagar el “impuesto de las urnas” para que pudieran votar. En California, el Forum animó al gobernador Goodwin Knight, veterano, a nombrar a otro veterano, Carlos Terán como el primer latino a servir en el Tribunal Municipal de Los Ángeles.
Los nombrados por el presidente Kennedy incluyeron a un número de veteranos, tales como Héctor Godínez, presidente de la Liga de Ciudadanos Latino Americanos Unidos. Kennedy nombró a Godínez al puesto de director general de Correos en Santa Ana, California. Godínez aprendió a ser líder como comandante de tanque bajo el general George Patton.
El presidente Johnson también se valía de los veteranos. En 1964, nombró a Daniel Luévano al cargo de subsecretario del Ejército, puesto que le daba el cargo más alto 4alcanzado por los latinos en el gobierno federal.
Esta misma dinámica de los veteranos con roles importantes en el gobierno se dio de igual forma antes de la segunda guerra mundial.
Después de ser electo en 1938, el gobernador Culbert Olsen, de California, nombró a Anthony P. Entenza al Veterans Home Board.
Entenza sirvió como el pasado comandante nacional de los Veteranos de Guerra Hispano-Americanos.
Olson también nombró a Ernesto Orfila al Veterans Welfare Board. Veterano de la primera guerra mundial, Orfila tenía un papel activo en la American Legion.
Entenza y Orfila era dos de los muy pocos abogados de habla hispana en la nación.
Dada esta historia, es difícil comprender cómo Ken Burns pasó por alto el inmenso papel que jugaron los latinos en la segunda guerra mundial. Por su parte, PBS tenía conocimiento del tema por lo que en el 2002 yo serví de historiador para un mini-documental sobre los veteranos latinos que se emitió junto con el programa American Family, con las estrellas Edward Olmos y Raquel Welch.
Los latinos han servido honradamente en los campos de batalla y dentro del ámbito cívico. Esto último lo examino extensivamente en mi nuevo libro, The Search for a Civic Voice: California Latino Politics.
(Kenneth Burt es autor de The Search for a Civic Voice: California Latino Politics. Si desea mayor información, visite www.KennethBurt.com). © 2007