por Joanne Washburn
El coco tuvo una vez una mala reputación debido a su alto contenido de calorías y grasas saturadas. Los dietistas solían advertir contra el consumo excesivo de coco y de ingredientes derivados del coco, como el aceite de coco, la leche de coco y la harina de coco, debido a los riesgos para la salud asociados con las grasas saturadas.
Pero en los últimos años, cada vez más personas han comenzado a abrazar el coco como un alimento saludable prometedor, y por una buena razón. Por un lado, se ha demostrado que mejora los niveles de colesterol y azúcar en sangre. También está repleto de nutrientes esenciales y antioxidantes que protegen contra la inflamación.
Además, el coco es un alimento extremadamente versátil. También se puede convertir en azúcar, mantequilla y nata. También puede simplemente comer carne de coco o beber agua de coco tal como está. Además, puede utilizar el coco o ingredientes derivados del coco en recetas saladas para obtener un sabor ligeramente dulce y a nuez.
Aquí hay un vistazo más de cerca a algunos de los beneficios para la salud del coco:
- Aporta nutrientes y antioxidantes
El coco contiene varias vitaminas y minerales esenciales, así como potentes antioxidantes.
Esto es lo que contiene una taza de pulpa de coco fresca:
- Proteína: 6 por ciento del valor diario (VD)
- Zinc: 9 por ciento de la VD
- Fósforo: 14 por ciento de la VD
- Selenio: 16 por ciento de la VD
- Potasio: 6 por ciento de la VD
- Hierro: 11 por ciento de la VD
- Cobre: 41 por ciento de la VD
- Vitamina B1: 5 por ciento de la VD
- Mejora los niveles de colesterol
Aproximadamente la mitad de la grasa saturada del coco proviene del ácido láurico, que ayuda a elevar los niveles de colesterol «bueno». Este colesterol ayuda a eliminar otras formas de colesterol del torrente sanguíneo que, de otro modo, podrían obstruir las arterias y aumentar el riesgo de problemas cardíacos.
En un estudio, los investigadores encontraron que la leche de coco aumentaba el colesterol bueno y reducía el colesterol «malo» mejor que la leche de soja.
Tenga en cuenta que el aceite de coco es 100 por ciento de grasa, la mayoría de las cuales están saturadas. Las grasas saturadas pueden aumentar los niveles de colesterol malo, por lo que no se consideran saludables. Aún así, no hay nada de malo en usar pequeñas cantidades de aceite de coco en el contexto de una dieta saludable. Solo asegúrate de que no sea el único aceite que estás usando.
- Reduce la presión arterial
Los cocos contienen potasio, un mineral esencial para mantener niveles saludables de presión arterial. Ayuda a ensanchar los vasos sanguíneos para una mejor circulación y asegura que su corazón lata de manera constante.
- Reduce la inflamación
El coco es una excelente fuente de compuestos potentes que ayudan a reducir la inflamación, como el ácido cafeico, el ácido ferúlico y el ácido p-cumárico. El procesamiento de alimentos puede provocar la pérdida de estos compuestos, por lo que debe elegir el coco crudo fresco y sin procesar y los ingredientes derivados del coco.
- Promueve el control del azúcar en sangre
También se ha demostrado que el coco ayuda a controlar el azúcar en sangre. En un estudio de 2011, los investigadores alimentaron a ratas diabéticas con proteína de semilla de coco y encontraron que las ratas experimentaron una mejora en el daño pancreático relacionado con la diabetes. Atribuyeron esta mejora a la capacidad del aminoácido llamado arginina en el coco para promover la regeneración de las células beta en el páncreas. Las células beta producen insulina, la hormona que controla el azúcar en sangre.
Cómo incorporar el coco a tu dieta
Puede ver cocos marrones y verdes en las tiendas de comestibles asiáticas y en los mercados especializados. En realidad, son la misma variedad pero difieren en términos de madurez. Los cocos verdes son más jóvenes y tienen más jugo que carne, mientras que los cocos marrones están completamente maduros y tienen más carne que jugo.
Para elegir el mejor coco, busque uno que se sienta pesado para su tamaño. Agite el coco y escuche si hay líquido en el interior. Evite los cocos con grietas.
Puede tomar mucho trabajo extraer la carne de coco de todo el coco, razón por la cual muchas personas compran carne de coco recién rallada o seca y rallada. La carne también se procesa para hacer leche de coco, mientras que el jugo dentro del coco está disponible como agua de coco.